Atentado de la banda terrorista ETA contra todos los vascos

Las láminas de madera empezaron ayer a sustituir provision almente las lunas de las ventanas destrozadas el pasado miércoles en el edificio Bami por el impacto de la explosión del coche bomba con 100 kilos de explosivos colocado por la banda terrorista ETA en el aparcamiento. A la espera de que la fachada acristalada recupere su aspecto original, los paneles de madera serán reforzadas con plásticos para evitar que entre la humedad en caso de lluvia.
En las instalaciones de EITB, los trabajadores de la página web, el área más castigada por la explosión, ya habían sido reubicados en otra zona de la redacción y el servicio de comedor se ha trasladado a la sala colindante, que no sufrió daños. Los empleados tendrán que a costumbrarse a trabajar con los ventanales en precario, en unas instalaciones inauguradas oficialmente hace ocho meses. La dirección de EITB calcula que las obras de reparación de los daños causados por el atentado se prolongarán dos meses y medio.
El Ayuntamiento de Bilbao informó ayer de que las tareas de retira da de cristales de la fachada continuarán otros cuatro o cinco días más. Equipos del parque municipal de bomberos están arrancando los trozos de cristal que permanecen en las ventanas uno a uno para evitar que se desprendan y caigan a la calle.
A lo largo de la jornada de ayer un retén especial de limpieza continuó con la retira da de cristales y escombros. A las cinco toneladas de deshechos recogidas en el entorno del edificio afectado en las primeras 24 horas tras la explosión, se sumaron ayer cerca de 40 toneladas más.